miércoles, 2 de abril de 2008

Instalación científica, a su mínima capacidad



La Jornada (México) - hace 4 horas

Laura Poy Solano

Después de 60 días de que empezó la huelga en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), instalaciones destinadas a la investigación científica de vanguardia, como la Unidad de Producción y Experimentación Animal (UPEAL) permanecen a su mínima capacidad, pero en “buenas condiciones”, en espera de un acuerdo entre el Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM (SITUAM) y autoridades de esa casa de estudios.


Considerada uno de los centros especializados más importante de América Latina para la reproducción y cría de animales, de alta calidad genética y microbiológica, actualmente la UPEAL mantiene en “perfectas condiciones 5 mil roedores –ratones, ratas y hamsters–, 250 conejos y 25 borregos, gracias al apoyo del sindicato y de la universidad, que han permitido la presencia de un equipo de expertos en dicha área, afirmó Ivonne Heuze, responsable del bioterio.
Agregó que luego de que empezó el conflicto se acordó con sindicato y autoridades la “lista del personal que podría ingresar a las instalaciones y garantizar que todo marche bien y, gracias a que contamos con un edificio inteligente, gran parte de las condiciones de mantenimiento se monitorean por computadora, aunque el jefe de este departamento, Antonio Morales, puede ingresar al inmueble, así como un equipo de tres veterinarios y seis investigadores”.
Heuze afirmó que los contratos con laboratorios privados para la entrega de diversos animales se han estado cumpliendo, gracias al apoyo de sindicalizados, investigadores y autoridades, porque a todos nos queda muy claro que vamos a cuidar y proteger un proyecto que es para toda la comunidad universitaria”.
Dijo que, luego de dos meses de huelga, el bioterio “pasó su prueba de fuego, aunque han tenido que suspenderse algunas investigaciones, y otras que llevaban mucho tiempo son las que hemos estado vigilando”.
Agregó que debido a lo prolongado del conflicto, “se han obsequiado a universidades públicas cerca de mil 500 animales, en su mayoría roedores, para no sacrificar sus vidas, sin aportar algún beneficio al desarrollo científico”.

1 comentario:

Miguel González Madrid dijo...

02 de abril de 2008, 10:55 hrs.

En verdad, de facto la UAM ha quedado en manos de un puñado de sesenta personas. Es inaudito, pero es la realidad.

Con esa cantidad de delegados a favor de continuar la huelga ¿se cumplió el quórum para que el Comité de Huelga pudiera tomar una decisión trascendental? Del total de delegados que hace dos meses votaron si se estallaba o no la huelga, en este momento sólo un tercio tiene de cabeza a una gran institución. A leguas se observa que el sistema de decisiones del SITUAM en plena huelga es antidemocrático; ni siquiera los viejos partidos comunistas y pro-soviéticos llegaron a ese extremo, pues por lo menos daban la apariencia de que todos estaban de acuerdo.

¿Ustedes (Martinelli, Velasco, Venadero, Aboites, Lomas, Ramos) qué opinan de ese sistema de votaciones y de toma de decisiones? ¿Es mejor o peor ese sistema que el utilizado por otras organizaciones en donde impera el caudillismo, los intereses oligárquicos y el aniquilamiento de adversarios? Ustedes saben que el fracaso del SITUAM al no alcanzar los porcentajes reclamados será también su propia lápida. ¿Por qué inmolarse tontamente? ¿Todavía piensan que la respuesta institucional hacia el continuamente modificado pliego petitorio del SITUAM será una excepción en el país y, tal vez, en el mundo? No cabe duda que, incluso, han superado la autoestima de Vicente Fox y la soberbia y el ego de Hugo Sánchez, por mencionar sólo casos patéticos recientes en nuestro país. ¿Son sus propios temores al fracaso los que motivan a mantenerse en el campo de combate? ¿Cuál es su concepción de Universidad pública en donde de manera permanente entran en conflicto derechos laborales y derechos de educación? ¿Alcanzan a distinguir correctamente entre, por una parte, la defensa abstracta de condiciones de trabajo y de vida de los trabajadores y, por otra, las circunstancias concretas en que se puede dar esa defensa? ¿Cuántos aliados han ganado o perdido en el periodo de huelga dentro de la UAM? ¿Ahora tienen más adversarios o críticos? ¿Acabará su compromiso de alentar la huelga cuando se agote el fondo de resistencia? ¿Estarían dispuestos a devolver públicamente la ayuda quincenal que reciben, desprendida del fondo de resistencia, pero a mantener la defensa de sus convicciones en cualquier momento? ¿Qué es más valioso para ustedes: el dinero que les permite sobrevivir materialmente un tiempo en huelga ó sus convicciones políticas e ideológicas? ¿Están convencidos de que la democracia se reduce a la emisión de votos aun cuando no representan la mayoría de quienes tienen derecho a votar? ¿Están de acuerdo, entonces, con la democracia procedimental que tanto criticaron en el pasado? ¿Quién de ustedes trae nuevas indicaciones desde España? Sus respuestas revelarán su propio perfil. Su silencio será una forma de responder.