lunes, 24 de marzo de 2008

No más reuniones con el sindicato: UAM

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No más reuniones con el sindicato: UAM


El Economista (Suscripción) - hace 2 horas


Publicadas por Negociaciones UAM SITUAM a la/s 7:48 p.m.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

El SITUAM ha mostrado una vez más su estupidez y estrechez de miras. Su división interna tiene paralizado a este remedo de organización gremial, que en su semianalfabetismo no sabe sumar, y por tanto entender que cuando no hay dinero, no hay dinero. Más bien deben dirigirse a sus líderes morales Jorge Ramos y Hugo Aboities para que hagan una procesión a la Basílica de Guadalupe para que lluevan billetes y monedas del cielo. A Aboites no le causará ninguna dificultad porque se cree una combinación de Hidalgo y de Morelos. El tiempo avanza y nos acercamos cada vez más al precipicio. Pero tendremos todo el tiempo del mundo para lamentarnos por lo que no supimos defender. Por eso se exhorta a la Rectoría de la Universidad a que, apoyada en todos los recursos legales a su alcance, haga prevalecer su autoridad en defensa de un interés superior. No está por demás condenar al eterno alcahuete Arturo Alcalde, uno de los responsables de la situación por la que vivimos.Basta ya de suspensión de clases, a regresar mañana a la Universidad. Y una pregunta: Si el CENDI es una aberración, por qué ofrecer su reapertura, si es un pozo sin fondo para las finanzas de la institución. Mejor retirarla definitivamente, así como el eventual pago de salarios caídos: ni del 100%, ni del 50% ni de nada. Que sea una sanción para los promotores de la huelga, y para los profesores que no han sabido defender a la institución que les da de comer. Y para los administrativos, cuya labor siempre ha sido muy cuestionable por los mismos alumnos, ni un cinco. Que se mantenga la firmeza y la congruencia. Es lo que salvará a la UAM de la peor situación que ha vivido.

24 de marzo de 2008, 8:31 p.m.
Anónimo dijo...

Licenciada Hermelinda: te están dando la oportunidad de oro de que libres esta situación tan complicada en que te encuentras. Valora el gesto, si algún gramo de cerebro tienes. Es hora del realismo, y de reivindicarte ante tu familia, tus seguidores y la Universidad. Con esa posición cerrada que mantienes, te pones cada vez más en manos de Jorge Ramos, y cuando quieras, ya no va a poder escapar. Primero debes poner en orden "tu" sindicato, llamando a cuentas al gángster Ramos, y ése será el principio de la afirmación de tu autoridad.

24 de marzo de 2008, 8:37 p.m.
Miguel González Madrid dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
24 de marzo de 2008, 9:03 p.m.
Miguel González Madrid dijo...

24 de marzo de 2008, 21 hrs.

¿Otro trimestre? Eso quisiera la gente corrupta del SITUAM y el vividor Aboites. Hay gente de base que ha sido engañada, les vendieron espejitos. Y, en verdad, la Secretaria General puede levantarse triunfante si la mesura guía sus acciones y evita bandazos.

Del otro lado, ya se los dijeron los funcionarios de la STyPS: usen su imaginación, no condenen a la UAM al pasado, propongan algo audaz, pero viable, que pueda ser avalado por quienes tienen el poder de la bolsa en el Estado federal. Escalonen la oferta. No todo se decide con las monedas contantes y sonantes. La salida al conflicto es de compromisos recíprocos, institucionales, incluso con un poco más que la sola mediación del gobierno federal.

Lo peor que puede suceder es que una o las dos partes renuncien a continuar las pláticas. Deben leer bien el plazo sugerido por el titular de la STyPS: no hay siguientes días, sino horas. Ir a la siguiente semana con el mismo conflicto sólo generaría confrontaciones al interior de la misma comunidad universitaria, y eso es lo que quiere Jorge Ramos, Hugo Aboites y compañía. ¿Quién dice o quién se cree eso de que la lucha sindicalista tiene una naturaleza revolucionaria? Al contrario, a veces resulta sumamente conservadora.

Crecen las voces pidiendo renuncias de uno y otro lado. Cuando el río suena es que agua lleva. No ponga sus cabecitas en la guillotina con la creencia de que tienen toda la razón. A estas alturas medir fuerzas es un juego perverso.

24 de marzo de 2008, 9:20 p.m.

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