lunes, 31 de marzo de 2008

Estudia Comité de Huelga del SITUAM oferta de la STPS


Estudia Comité de Huelga del SITUAM oferta de la STPS
La dependencia ofrece un paquete de aumento de 4.25% al salario, de 1.2% en prestaciones, el pago de un bono único de 2 mil 500 pesos y la mitad de salarios caídos.

Notimex
La Jornada On Line Publicado: 31/03/2008
18:23
México, DF.
En medio de un clima de incertidumbre y tensión, inició la sesión del Comité de Huelga del SITUAM en la que se definirá si se acepta o no la oferta que las autoridades laborales presentaron el sábado pasado para levantar la huelga.
Hermelinda Hurtado Guzmán, secretaria general del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM), señaló que durante el transcurso de la mañana las asambleas delegacionales analizaron el ofrecimiento referido.
Recordó que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) puso sobre la mesa un paquete que consiste en un incremento salarial de 4.25 por ciento, 1.2 en prestaciones, el pago de un bono único de dos mil 500 pesos y la mitad de los salarios caídos.
En entrevista, comentó que la Unidad Xochimilco se pronunció en favor de levantar el paro que ya cumplió 60 días, pero el campus Iztapalapa votó en favor de que continúe la huelga.
La dirigente sindical advirtió que el SITUAM rechaza la iniciativa de la Rectoría de llevar a cabo un referéndum en el que trabajadores y personal académico decidan si continúa o no el paro que afecta a más de 45 mil alumnos.
Enfatizó que el sindicato es el titular del Contrato Colectivo de Trabajo, por lo que la consulta que proponen las autoridades universitarias es ilegal.

1 comentario:

Miguel González Madrid dijo...

31 de marzo de 2008, 19:20 hrs.

Observaciones puntuales:

1. Todavía es posible establecer el acuerdo dentro de los márgenes del otro 50% de salarios, si el bono ya no se puede mover arriba de los 2 mil 500 pesos. O inversamente.

2. El "referéndum" del miércoles no debe tener ese nombre especializado. En América del Sur utilizan "referéndum" y "plebiscito" indistintamente. En México ambos instrumentos tienen objetivos diferentes. El referéndum es un instrumento de consulta sobre normas jurídicas generales que se requieren, que están en proceso o que, incluso, están vigentes. El plebiscito es un instrumento de consulta sobre actos de gobierno o políticas públicas. En ambos casos puede haber petición ciudadana para su realización. En el DF es el IEDF quien se encarga de la organización de -entre otros- estos instrumentos de consulta ciudadana. El DF tiene, por cierto, una de las mejores legislaciones sobre participación ciudadana, aunque demasiado desperdiciada.

El caso de la UAM es atípico, porque: 1) hay una situación de huelga; 2) no hay regulación para consulta en estos casos y menos para Universidades; 3) los conflictos laborales se dirimen de manera bilateral, ante mediadores de oficio, ante órganos de conciliación o ante tribunales; y 4) no se sabe quién validará los resultados del llamado "referéndum".

Por último, el instrumento que puede aplicarse el miércoles no puede ser un referéndum ni un plebiscito, sino una simple consulta a la comunidad universitaria. De todos modos, ¿quién validará los resultados? Si el SITUAM, como dice su dirigente, tiene facultad para organizar una consulta como la que se pretende, ¿por qué nunca tomó la iniciativa al respecto? Además, el SITUAM no podría consultar a todas la comunidad universitaria. Eso de las "asambleas de base" es un viejo, simple y ya revelado (por el célebre “mago enmascarado”) truco de magia. En el caso del SITUAM, funcionaría mejor una consulta general a todos los sindicalizados sobre la continuación o no de la huelga, pero sería necesaria la fe pública para reforzar la validación de resultados.

Aun así, en la UAM no se cuenta con una legislación que permita hacer ese tipo de cosas, y sobre la marcha la consulta del miércoles sólo sería indicativa del malestar generalizado que ya generó el largo periodo de huelga y el manejo que se le ha dado por algunas corrientes sindicales de todos ya conocidas, no precisamente la huelga misma.

Finalmente, esperemos no llegar ya a cualquier consulta abierta el miércoles o posteriormente sobre el asunto de la huelga y que, por tanto, la cordura y sensatez sean principios que rijan las decisiones de los delegados sindicales. Algunos de esos delegados no conocen esos principios, pero me parece que la mayoría sí los conoce.