sábado, 23 de febrero de 2008

Pospone SITUAM reunión para el lunes 25 de febrero // La Jornada

Pospone SITUAM reunión para el lunes 25 de febrero
La Jornada (México) - hace 2 horas

No hubo quórum para la reunión de hoy, pues sólo asistieron 44 delegados. Ambas partes se acusan por el estancamiento del diálogo.

Laura Poy y Notimex Publicado: 23/02/2008 18:54

México, DF. Ante la falta de quórum para continuar con los trabajos del Comité de Huelga, el Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM (SITUAM) acordó convocar a los delegados el próximo lunes 25 de febrero por la tarde, a fin de someter a votación las directrices del movimiento y un nuevo plan de acción, así como fijar la fecha para reiniciar las negociaciones con las autoridades universitarias.



En tanto, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) insistió en que el sindicato no ha definido una postura clara ante el conflicto.



En un comunicado, la casa de estudios destacó que luego de varias reuniones del comité de huelga “no ha podido construir acuerdos entre las distintas corrientes del mismo”, por lo que hizo un llamado para retomar la discusión bilateral



Expresó que la inexistencia de quórum (pues sólo asistieron 44 delegados a la reunión de hoy) se traduce en pérdida de más días en las actividades académicas y la solución del conflicto.



Sin embargo, el Comité de Huelga negó que haya divisionismo en el gremio, como aseguran las autoridades universitarias, y que ése sea el motivo por el cual no se llega a un acuerdo para levantar la huelga, que inició el 1 de febrero.



Al respecto, el secretario de Conflictos del SITUAM, Eladio Torres Flores, responsabilizó a la rectoría de que no se haya resuelto el paro, ya que se niega a ofrecer más de 4.25 por ciento de aumento salarial y 1.2 por ciento en prestaciones.

Palabras clave:
UAM SITUAM

1 comentario:

Miguel González Madrid dijo...

http://mgmundoposible.blogspot.com/

Sábado 23 de febrero de 2008
(02) Del conflicto indeseable a los números posibles


(Corrección final: 23 de febrero, 11:08 hrs)

Con cuidado. Las ilusiones aparte, aunque nuestras aspiraciones sean legítimas y nuestras demandas justas.

Los cálculos de la carga presupuestal que implica la satisfacción de demandas de salario directo e indirecto es importante. Pero, incluso siendo proporcionalmente reducida en el total del presupuesto en operación, requiere de una recomposición por capítulos. Por la naturaleza de los conceptos calculados, el capítulo 1000 sería el de mayor impacto. Las reglas que rigen los presupuestos públicos impiden efectuar transferencias al capítulo 1000 (gasto corriente), y no sé si existe algún tipo de excepción al respecto en el ámbito federal. Por tanto, satisfacer demandas laborales con un impacto evidente en dicho capítulo requiere, básicamente, que el capítulo 1000 sea ampliado por la vía de un incremento presupuestal o modificado mediante algunas transferencias de dinero propio. Esta segunda vía implica un recorte de gastos de representación, reducción de personal de confianza, mayor disciplinamiento del gasto en general para producir ahorros, etc. Esta posibilidad, no obstante, implica dejar intocada la cuestión del reparto del dinero anualizado entre todos los órganos y organismos públicos, además de la naturaleza del presupuesto público en una sociedad capitalista.

Sin duda, es oportuno revisar las proporciones del gasto universitario, no sea que, como en algunos gobiernos, la proporción de gasto corriente sea significativa y ahogue la posibilidad de apoyar actividades creativas, desarrollo tecnológico, desarrollo de infraestructura, etc.

El cálculo de casi 2% del impacto del costo presupuestal de satisfacer el pliego petitorio en la parte económica puede dar la impresión de que no sería difícil que el órgano interno competente autorice las transferencias necesarias. Sin duda, sería raro que alguno de los beneficiados directos se quejara de recibir más de lo que antes recibía en salario directo e indirecto. Pero esta no es precisamente una cuestión de cuentas alegres. El reparto del dinero por órganos y organismos, con un criterio de prioridades, y de escasez de recursos públicos, hace que todo mundo dispute hasta el último centavo en el esquema de gasto federal. Entonces, ¿es posible, en 2008, conseguir más recursos para la UAM y, particularmente, lograr una ampliación de alrededor de 2% para gasto corriente y, en menor medida, para otros capítulos (capacitación, adiestramiento, etc.)? Por ley debe exigirse que se atiendan diversas condiciones laborales y de vida. Los derechos son irrenunciables, sólo que para concretarlos en formas dignas de vida y de trabajo ello supone un camino tortuoso. Lo que debe discutirse, además, es si lo que se disputa por parte de los trabajadores asalariados del país no es la misma rebanada del pastel que anualmente se programa para tales efectos, mientras que el capital protege, como sea, la mayor rebanada, que representa 90% del pastel.

El asunto del cálculo de proporciones, como se observa, no es tan sencillo. En el fondo, nos lleva a dar cuenta de que el capital, con el modelo neoliberal imperante, ha logrado salvar bien su propia rebanada. No descubro el hilo negro, sólo sugiero que, como buenos marxistas, hay que releer al propio Marx. Que no se nos olvide de dónde provienen los ingresos del Estado y toda la riqueza de una sociedad y, además, que el Estado del bienestar, desmantelado desde hace varios años, requiere ser reconstruido más allá de una vía puramente sindicalista, que no debe ser menospreciada, pero tampoco puesta en el centro de las luchas sociales. Quien adore el sindicalismo tal vez se tope en sus pesadillas con Lenin, por ejemplo, si no con el mismo Marx. Sólo sugiero dar el justo lugar a las luchas sindicales, por muy impactantes y emotivas que sean, o incluso por la lamentable pérdida de vidas que en algunos casos suelen implicar.

En fin, viejos temas requieren ser replanteados a la luz de nuevas alternativas. Tal vez el propio concepto de sindicalismo deba ser reformulado a la luz de experiencias en diversas partes del mundo. Conviene no ahogarnos en nuestras propias penas, no obsesionarnos con la creencia de que el adversario se encuentra en casa, no ignorar que en otra parte están los verdaderos dominadores.

No queramos avanzar un paso, que luego implique retroceder dos pasos. Antes de volar, verifiquemos que nuestras alas no se derritan al aproximarnos al sol que queremos alcanzar.

Saludos.

Miguel González Madrid.
mgmadrid@terra.com.mx